Si dibujásemos en una gráfica la confianza en uno mismo, tendría una forma muy similar a la del logo de Nike: cuando no tenemos ni idea, nuestra confianza está muy alta. En cuanto nos damos cuenta de que somos unos patanes, nuestra confianza cae. Y a partir de ahí, a medida en que vamos cumpliendo años y ganando experiencias, esa confianza va aumentando poco a poco.
Yo a los 17 años tenía una enorme confianza en mi capacidad de comprender asuntos complejos y aprender habilidades de forma muy rápida. Eso se hundió tan pronto como tuve que ir entrando al mercado laboral, y desde entonces ha ido aumentando muy despacio en la medida en que me arriesgaba, me salía mal, volvía a intentarlo, volvía a salirme mal, y un tiempo después me iba saliendo bien.
Con 22 años pasé de vivir en casa de mi madre y no saber gran cosa sobre nada a tener que dirigir a tres personas más mayores, inteligentes y cultas que yo. Suplía la desconfianza con exageradas jornadas de trabajo.
Desconfío de quienes ya deberían haber superado esa etapa pero sienten una confianza brutal en su solucionismo de todo a 100. Es atractivo pensar que cuestiones complejas tienen soluciones fáciles, pero la realidad siempre es mucho más tozuda. Y cuando lo descubres, solo te queda agachar la cabeza e iniciar el ascenso lento.
Sí confío en quienes saben que la confianza también se entrena.
Un futbolista con mucha calidad que suele fallar en el chut puede ir entrenando un tipo de finalización concreta que le dé confianza cuando llegue a portería. Chutará mejor, pero sobre todo, ganará confianza. ¿Les suena?
Un señor patoso a quien le aterre la idea de bailar en público estando sobrio puede ir practicando un par de pases de baile que sirvan para cualquier melodía. En la próxima boda no tendrá que esperar al tercer whisky para dejar de ser el rarito. Ejem…
Conozco a una amiga que un día, mientras su marido conducía por una carretera de montaña con muchas curvas y poca visibilidad, le pidió ser ella quien condujese durante todo ese tramo. La frase fue “Si no me acostumbro a conducir en sitios así nunca va a dejar de darme miedo”. También conozco a gente que nunca ha conducido por miedo y no tiene intención de que deje de ser así.
¿Qué sería bueno que fueses entrenando? ¿Dónde necesitas ir ganando confianza?
💽 Only the Strong Survive, el nuevo disco de Bruce Springsteen. Energía y aspereza.
🛒 Superstore (Netflix). Una especie de The Office en un hipermercado de Missouri, bastante divertida. Episodios de veinte minutos.
🤔 ¿Elon Musk o el Sr. Burns? Adivina quién dijo cada frase. Yo he sacado un sonrojante 50%.
Yo estoy en un período de ganarme esa autoconfianza y poco a poco lo voy haciendo.Ver cómo los demás tienen confianza a tope en mí es muy gratificante pero lo importante es trabajar en conseguir subir a tope esa autoconfianza.Gracias Javier por tus reflexiones y siempre frescas recomendaciones.
La principal confianza a ganar, esta en uno mismo y en saber creer y quererse, sin rayar el narcisismo, siempre con el reconocimiento hacia los demas como telon de fondo. Nuestra autoconfianza esta en parte sustentada en nuestra relacion con nuestro entorno y lo que en él, aportamos. Romper esa barrera es poner en valor de lo que somos y sobre todo quien somos. Gracias Javier. +1